Flores anticipó que, de mantenerse la tendencia, el país superará los 1,4 millones de turistas internacionales al cierre del año, superando el récord histórico de 1,2 millones alcanzado en 2019. La participación en ferias globales como FITUR y la colaboración con el sector privado fueron claves para este impulso, así como la nominación de Bolivia como “Destino Emergente Más Deseable del Mundo” en los Wanderlust Travel Awards 2025.
La campaña “¡Vota por Bolivia!” busca movilizar a ciudadanos y viajeros para obtener este reconocimiento, considerado uno de los más influyentes del Reino Unido, con más de 200.000 votantes previstos. La votación permanecerá abierta hasta el 17 de octubre y se realiza a través del portal oficial de la revista Wanderlust.
En paralelo, el país fue destacado por medios como la BBC de Londres, que lo incluyó entre los 15 principales destinos para visitar en 2025, resaltando íconos como el Salar de Uyuni. También se ha registrado una diversificación geográfica en los flujos turísticos: además de los pasos fronterizos tradicionales, crecen las llegadas a regiones como el Chaco boliviano, Villamontes y el área protegida Eduardo Avaroa, con visitantes de Chile, Argentina y Paraguay.
A medida que la industria continua recuperándose, los profesionales del turismo argentino deben considerar a Bolivia como un destino aliado, donde se pueden establecer sinergias que beneficien a ambas naciones, intercambiando propuestas y programas turísticos conjuntos que enriquezcan la oferta en la región.
El futuro del turismo en Bolivia se vislumbra prometedor, y la colaboración entre países como Argentina y Bolivia puede resultar en un aumento significativo de turistas circulando entre ambos destinos, creando una red de experiencias inolvidables. La proyección de tener un flujo turístico sostenido es clave para consolidar a Bolivia como un actor relevante en el mapa turístico internacional.
Tal como el gobierno local lo expresó a mediados de abril pasado en el medio de comunicación local La Razón Radio e informamos en nuestra nota publicada en ElDiariodeViaje, existe una política de estado para recuperar en más del 50% del turismo interno y superar el 30% el externo.
De acuerdo a los resultados arrojados por un estudio de la Organización Internacional de Turismo (OIT), los viajes en Bolivia disminuyeron un 65% en 2020 a raíz de la pandemia con el consiguiente cesanteo de 100.000 trabajadores.