Un pueblo subterráneo de Australia brinda una experiencia única e irrepetible
Viernes, 12 Enero 2024 13:30

Un pueblo subterráneo de Australia brinda una experiencia única e irrepetible Foto: Billiken

Ubicado a ochocientos kilómetros de la ciudad de Adelaida, es uno de los destinos más turísticos de Australia porque Coober Pedy es un pueblo subterráneo que explota su pasado minero para atraer viajeros de todo el mundo gracias a sus centros de entretenimiento; visitas guiadas, una cancha de golf con césped sintético e infraestructura hotelera de primerísimo nivel como su oferta gastronómica.

En los albores del siglo veinte, un grupo de aventureros descubrió que esta localidad desértica de Australia Meridional escondía una reserva de ópalo, gema muy valorada en la industria de la joyería.

A los pocos meses se comenzó con la excavación en masa de profundos pozos que también se convirtieron en hogar de sus habitantes para evitar las tormentas de arena y los 45 grados de temperatura durante el verano.

Bautizada en 1915 como Coober Pedy, transcripción fonética inglesa de kupa piti que en dialecto aborigen kokotha significa agujeros del hombre blanco, en esta ciudad todo está bajo tierra porque hay casas, bares, hoteles e iglesias subterráneas.

Con una población estable de 2.000 habitantes, sigue siendo la mayor reserva mundial de ópalo acaparando el 80% del mercado global de este mineral. Para llegar a este destino turístico australiano hay que viajar por la la ruta Stuart Highway, popularmente conocida como A87.

Casa de Coober Pedy.

Actualmente, el 60% de su población desciende de europeos que arribaron tras la Segunda Guerra Mundial y, según las estadísticas gubernamentales, en la ciudad viven más de 45 nacionalidades diferentes. 

Además, el 2023 comenzó con restricciones para Australia porque -desde el pasado 5 de enero- todos los visitantes procedentes de China -incluyendo Hong Kong y Macau- deberán someterse a pruebas de Covid-19 como requisito obligatorio para ingresar a la potencia oceánica tanto en plan vacacional como en viajes de estudio o trabajo.

Desde julio de 2022 no se exige el esquema de vacunación contra el Covid-19 al ingresar a las fronteras o aeropuertos de Australia aunque se mantiene la obligación de utilizar barbijos o tapabocas durante los vuelos internacionales a ese país.

A mediados de abril pasado, por primera vez después de dos años de cierre de fronteras debido a la pandemia de Covid-19, Australia recibió un crucero internacional con la esperanza de retornar a las épocas previas a 2020 cuando arribaban 350 embarcaciones por año con un tráfico de 600.000 pasajeros que aportaban 3.800 millones de dólares en consumo de productos y servicios locales.

Iglesia de Coober Pedy.